martes, 26 de febrero de 2013

Viaje a Tierra Santa

NUEVA PÁGINA: VIAJE A TIERRA SANTA

Estrenamos nueva página en nuestro blog: Viaje a Tierra Santa. En ella, durante esta semana, se irá escribiendo un pequeño diario del viaje que un grupo de la parroquia inició el pásado sábado día 23 hacia Tierra Santa y que concluirán el próximo sábado día 2. Podréis leer los lugares que se visitan cada día además de ver algunas fotos de dicho sitios y momentos que están viviendo. Esperamos que os guste y animaros a escribirnos comentarios.

Cafarnaúm, la ciudad de Jesús

sábado, 23 de febrero de 2013

Cena del hambre

CENA DEL HAMBRE 22-02-13. CAMPAÑA MANOS UNIDAS 2013: NO HAY JUSTICIA SIN IGUALDAD.

En la tarde del viernes 22 de Febrero tuvimos en la parroquia la "cena del hambre" que comenzó con la eucaristía a las ocho de la tarde. Al final de la homilía nuestro párroco nos explicó a qué proyecto iba a ir destinado el dinero que esa noche se recaudase: la construcción de tres escuelas en el norte de la India para la educación de una zona de unas  20.000 personas.

Al final de la misa, los jóvenes de la parroquia de catequesis de infancia y juventud representaron un "mimo" en el que mostraron a todos los asistentes como, a pesar de todas los malos hábitos o influencias negativas que podamos tener (injusticia, vicios, modas...) siempre está Jesús para liberarnos y darnos vida.
Uno de los temas tratados en dicho mimo fue el de la injusticia, en relación con la campaña llevada a cabo este año desde Manos Unidas: No hay justicia sin igualdad


Posteriormente vimos un vídeo-reflexión antes de pasar a los salones a disfrutar de un poco de caldo y un huevo duro. Ya allí, los jóvenes cantaron un rap sobre la PAZ. A continuación podéis ver algunas fotos de la tarde:


Por último, señalar que la cantidad recaudada, aportada por todos los asistentes al acto, estuvo entorno a los dos mil euros.

viernes, 22 de febrero de 2013

Videofórum

TARDE DE VIDEOFÓRUM 16-02-13. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


En este mes de febrero una de las actividades llevadas a cabo desde la parroquia para los jóvenes de catequesis de infancia y juventud ha sido una "tarde de videfórum".

Antes de comenzar a ver la película, tuvimos un rato de oración en la que nos centramos en otra de las partes del Credo continuando así con lo iniciado en la tarde-noche de castañas. Esta ocasión estuvimos reflexionando sobre el trozo que dice: ...que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de Santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios Padre Todopoderoso...

Posteriormente todos los niños y niñas asistentes vieron la película "En busca de la felicidad" a la vez que disfrutaron de unas ricas palomitas y chucherías. Así mismo, a mitad de la película aproximadamente se hizo una parada para degustar un delicioso bizcocho elaborado por una de las madres.


Para terminar, se charló sobre la película, sobre la actitud de sus personajes, sobre los valores que se veían reflejados y tratados en cada uno de ellos etc. 

Tarde de Manualidades

TARDE DE MANUALIDADES 26-01-13. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.

El pasado mes de enero y continuando con las actividades previstas para los jóvenes de catequesis de infancia y juventud de la parroquia, tuvimos en el Compás una "tarde de manulidades".

En esta ocasión y continuando con el enfoque iniciado en la tarde-noche de castañas, en la oración nos centramos en la segunda frase del Credo: Creo en Jesucristo, su único hijo, nuestro Señor. A través del evangelio de Juan 3, 16-18 y posteriormente con la visión de un pequeño vídeo profundizamos en el inmenso amor que Dios nos tiene, que por nosotros, por nuestra salvación, nos entrega a su Hijo.

El vídeo mencionado es un resumen del corto "Most":


Para terminar con la oración, escuchamos la canción "Como nos ama Dios" del grupo "Sound By Four"


Posteriormente los chavales se pusieron manos a la obra en la realización de distintas manualidades. Hicieron  llaveros, pulseras, marca páginas y  terminaron distintos cuadros con fotos de las actividades desarrolladas durante estos años atrás en catequesis. A continuación podéis ver algunas imágenes de la tarde:

Belenes

VISITA DE BELENES NAVIDAD 2012. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


El sábado 29 de Diciembre del 2012 los chicos y chicas del coro y del grupo de teatro de la parroquia estuvieron por Málaga visitando distintos belenes de la capital. 

Con esta actividad se quiso "premiar" a éstos jóvenes que sábado tras sábado se acercan a los salones del Compás para ensayar con el coro de la parroquia las canciones de la misa de niños o para ensayar los distintos teatros que se realizan a lo largo del año.

Algunas fotos de la jornada vivida las podéis ver a continuación:


Después de andar de arriba abajo durante toda la mañana, todos recargaron fuerzas con una buena hamburguesa a pie de playa. 

Teatro de Navidad

TEATRO DE NAVIDAD 2012. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


Otro año más, los jóvenes de catequesis de infancia y juventud de la parroquia de San Juan y San Andrés representaron el nacimiento de Jesús desde la aparición del ángel Gabriel a María hasta la adoración de los Reyes Magos al Niño.

Cada año intentan hacerlo lo mejor posible y por ello empiezan a ensayar desde octubre. Sábado tras sábado se reúnen por la mañana para ir aprendiéndose y ensayando cada uno su correspondiente papel. Desde el grupo de teatro de la parroquia se intenta que cada año los niños y niñas que participan interpreten personajes distintos para evitar que se aburran.

A continuación podéis ver un vídeo con fotos tomadas antes, durante y después de la actuación:


Fueron muchos los padres y los niños de catequesis del resto de grupos los que se acercaron para disfrutar de la representación y celebrar de este modo la Navidad. 

Aquí tenéis el vídeo del teatro. Esperamos que os guste.

miércoles, 20 de febrero de 2013

Tarde de Interpretaciones

TARDE DE INTERPRETACIONES 20-10-12. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.

Una de las primeras actividades que se ha llevado a cabo en este curso para los jóvenes de catequesis de Infancia y Juventud ha sido una "tarde de interpretaciones". En ésta actividad conocimos cual va a ser el lema/logo de nuestro grupo para este curso, tuvimos un rato de reflexión-oración y terminamos con distintas actuaciones que los niños tuvieron que preparar por grupos.

La dinámica seguida la podéis ver aquí. Fueron muchos los jóvenes de la parroquia que continúan en catequesis después de hacer su primera comunión los que participaron de esta actividad. Además, al tener que preparar distintas actuaciones en grupo, se conocieron mejor entre ellos, lográndose así una mayor unión del grupo de infancia y juventud de la parroquia.

A continuación podéis ver algunas fotos de los distintos momentos vividos:


Con las actuaciones de cada grupo se vivieron momentos inolvidables llenos de risas y carcajadas. Además, descubrimos que muchos de nuestros muchachos y muchachas disfrazados son grandes intérpretes y bailarines.

Cabalgata de Reyes

CABALGATA DE REYES NAVIDAD 2012. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


Otra de las actividades llevadas a cabo desde la parroquia para los jóvenes ha sido la participación con una carroza en la cabalgata de Reyes que cada año tiene lugar en nuestro municipio.

En la carroza iban representando un Belén Viviente todos los que realizaron el teatro de navidad, acompañados de los niños y niñas del coro además de muchos más niños de la parroquia vestidos de pastorcillos y ángeles. De esta manera, además de las carrozas de Melchor, Gaspar y Baltasar, la cabalgata de Coín contó este año con una carroza dedicada al Nacimiento de Jesús.

Durante el recorrido se lanzaron muchos caramelos además de camisetas, gorras, piruletas... Podéis ver un montaje de diversas fotos tomadas a lo largo de todo el trayecto:


Aunque fueron muchas las horas que se dedicaron a la preparación de la carroza pues era algo nuevo que se hacía desde la parroquia, todo el esfuerzo fue recompensado con las caras de ilusión y alegría que mostraban todos los niños y niñas que participaron en la cabalgata.

Convivencia de Adviento

CONVIVENCIA DE ADVIENTO (del 7 al 9 de Diciembre de 2012). CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


Durante los días 7, 8 y 9 de Diciembre del 2012 tuvimos en los salones del  Compás nuestra convivencia de Adviento. Comenzamos el viernes a las seis de la tarde (después de terminar la catequesis) y terminamos el domingo a las a las doce y media con la misa de niños. Durante estos tres días se desarrollaron actividades y talleres con el objetivo de prepararnos mejor para el tiempo de Adviento y  así, recibir el nacimiento de Jesús, la Navidad, como se merece. 

En el siguiente enlace podéis ver en detalle los horarios y las actividades desarrolladas. Fueron tres días de convivencia en los que se vivieron y compartieron momentos inolvidables. Todos los talleres y actividades tuvieron una gran aceptación por parte de los jóvenes, muchos de los cuales, a pesar de no dormir mucho, estaban desde bien temprano al pie del cañón.

A principios de marzo tendremos nuestra siguiente convivencia, ésta vez, centrada en la cuaresma. 

Subida al Convento Clarisas

CATEQUESIS DE ADVIENTO ("subida a las monjas") 30-11-12. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


El viernes día 30 del pasado mes de noviembre los jóvenes de catequesis de infancia y juventud de la parroquia trasladaron, como llevan haciendo varios años, su catequesis al convento de las Clarisas.

Cada grupo preparó una parte de esta catequesis-oración centrada en el tiempo de Adviento que comenzaría al siguiente domingo. Por un lado, un grupo se encargó de explicar a los demás el significado de la corona de Adviento usando para ello un "mural vivo" (mural de una corona que se iba componiendo conforme se iba explicando); los chicos y chicas de otro de los grupos hablaron sobre cada una de las velas que forman dicha corona. Y los demás grupos se encargaron de ir encendiendo estas velas y leyendo una pequeña oración y algunos fragmentos de ciertos evangelios por cada una de ellas.

Para terminar, todos fueron adornando el mural vivo con hojas de cartulina en las que con anterioridad escribieron sus peticiones para presentárselas al Señor. Mientras, las hermanas clarisas acompañaron el momento con sus canciones.

Tenéis algunas fotos de ésta catequesis a continuación:


Con esta catequesis "distinta" quisimos profundizar un poco más en el tiempo de Adviento que se empezaba y transmitir esa alegría y espera gozosa que supone este tiempo.

Y no queremos terminar esta entrada sin agradecer a las clarisas su recibimiento y acogida que siempre tienen con nosotros.

martes, 19 de febrero de 2013

Tarde-noche de Castañas

TARDE-NOCHE DE CASTAÑAS 17-11-12. CATEQUESIS DE INFANCIA Y JUVENTUD.


En el mes de noviembre se desarrolló otra de las actividades programadas para este curso, una "tarde-noche de castañas". En esta ocasión y con motivo del año de la FE, la oración se centró en la primera parte del Credo: Creo en Dios Padre Todopoderoso, creador del Cielo y de la Tierra. A través de un vídeo y de la lectura del primer capítulo del Génesis, profundizamos un poco más en el significado de la citada frase.

La dinámica seguida la tenéis con más detalle en el siguiente enlace. Y el vídeo mencionado para la guiar la oración fue un fragmento del siguiente:


Posteriormente y, divididos por grupos, todos los jóvenes que asistieron a la actividad pasaron un buen rato realizando diversas pruebas para la obtención del mayor número de puntos posibles que luego serían canjeados por castañas asadas. Éstas pruebas o juegos iban desde adivinar mediante mímica el título de una película hasta representar mediante un pequeño teatro una escena bíblica, pasando por averiguar qué personaje bíblico era el que un compañero estaba dibujando.

Para terminar compartimos entre todos una magnífica cena compuesta por hamburguesas y perritos calientes.

Podéis ver fotos de la tarde-noche vivida a continuación:



viernes, 15 de febrero de 2013

Por Isabel Orellana


BENEDICTO XVI. EL PESO DE LA CRUZ



El 11 de febrero de 2013, festividad de Nuestra Señora de Lourdes, forma parte ya de la historia de la Iglesia y del mundo, por ser la fecha elegida por un pontífice, tan amado como denostado según el prisma de que se trate, para presentar su renuncia. Una noticia impactante, inesperada, que ha dado la vuelta al mundo suscitando toda clase de emociones y comentarios. Para los católicos de pro un hecho conmovedor que sitúa a este papa en el frontispicio de la humildad y de la inocencia evangélicas. Si todavía existe alguien que dude de la grandeza de este hombre menudo, que tras sus rasgos de timidez esconde una fortaleza y temple admirables, hoy, el día después, debería comenzar a recapacitar y tomar en consideración el trasfondo que encierra una decisión de esta magnitud. Porque quien ha dado este paso no es una persona inconsciente, quejumbrosa y débil. Por el contrario, el que todavía es Vicario de Cristo en la tierra tiene tras de sí un bagaje espiritual, intelectual y humano que no puede traducirse con palabras, y del que ya ha dejado constancia fehaciente en su imponente trayectoria.

El tiempo, que todo lo pone en su sitio, juzgará con la objetividad que procede la gracia que comenzó a derramarse sobre la Iglesia el 19 de abril de 2005 cuando se convirtió en el 265 pontífice. Ese día el peso de la cruz comenzó a ser casi tangible para él. Simplemente el hecho de haber asumido nada menos que la prefectura de la Congregación para la Doctrina de la Fe durante décadas, misión que le ponía en el punto de mira de los críticos de turno por tratarse de un dicasterio que suscitaba abiertas reticencias, apuntaba en su contra. Estos censores de conductas ajenas, que con su acostumbrada miopía no supieron atisbar la hondura que le acompañaba, se limitaron a calificarle de forma tan sesgada como equívoca de conservador con acento peyorativo, hoy han modificado sin rubor su esta calificativo reemplazándolo por el de revolucionario. Lo señalaron como alguien alejado de la realidad y necesidades de su tiempo, y otras presuposiciones basadas en múltiples prejuicios. Todo ello, junto a la comparación con su predecesor el beato Juan Pablo II, fulgurante en su personalidad frente a la escasa notoriedad que se vislumbraba en él, parecía convertir su pontificado en una especie de losa. Incluso se apuntaba a su incapacidad para conducir la Iglesia por las vías que cada uno pensaba debía discurrir –pura osadía–, haciendo dudar de la eficacia de su labor pastoral antes incluso de que comenzara a ejercerla. Fueron errores de peso que enseguida quedaron descalificados.

Benedicto XVI, el brillante intelectual respaldado por un currículum de infarto, el sacerdote virtuoso y fiel a Cristo en todo momento, dio una gran lección al mundo con toda humildad y sencillez. Supo afrontar estas circunstancias adversas con ejemplar serenidad, delicadeza, sin conatos de rivalidad, envidias ni otros desmanes que ajenas intenciones y no buenas precisamente vertieron sobre él desde el primer instante. Ahí está su elegancia puesta de manifiesto en una cálida sonrisa con la que se asomó a su ventana, sonrisa que ha iluminado momentos de alta tensión y complejidad estos años, tras la cual difícilmente se hubiera podido vislumbrar la envergadura de la delicada misión que llevaba sobre sus hombros. Porque los gestos de este pontífice siempre han sido entrañables, cercanos, conciliadores, amables en cualquier situación, ponderados y dispuestos a acoger toda miseria con inmensa ternura. Si dudan de ello, busquen en las hemerotecas declaraciones e imágenes; examinen minuciosamente los pasos que ha dado. Los medios de comunicación acumulan millares de testimonios al respecto. Hoy día se cumple en gran medida el aserto evangelio cuando dice que todo lo oculto saldrá a la luz. El papa se ha extendido con tanta largueza y sencillez como naturalidad, todo lo cual en conjunto remite a la idea de una responsabilidad que hubiera podido parecer infinitamente más liviana de lo que realmente es y ha sido. Pero todo eso no le libera del peso de la cruz, compartida con Cristo, que ha cargado obedientemente sobre sus espaldas sosteniendo a la Iglesia.

En ese espacio recóndito, inviolable, en el que únicamente penetra Dios cuando la criatura se dirige a Él, el papa en su soledad, sin tener donde reclinar su cabeza, hincado de rodillas ante el sagrario, habrá meditado largamente y no sin dolor en esta ponderada resolución que debía tomar. Simplemente esta escena conmueve poderosamente aunque solo fuera por tratarse de alguien que por edad y vencimiento progresivo de las facultades  -ley de vida-, pero en toda su conciencia, conoce mejor que nadie la trascendencia de la misma. Si a eso se le añade su amor a la Iglesia que lleva clavada en lo más hondo de su ser no cabe duda de que el aguijón del sufrimiento que comporta pensar en los demás por encima de uno mismo ha debido tener cotas inmensas. Eso da idea también de la fragilidad que advierte en su persona y de la humildad con la que la ha afrontado aún sabiendo que es espectáculo para el mundo. Es un gesto humano, como también se ha destacado, de innegable valentía que merece todo respeto.

La historia extraerá las notas de una sinfonía de entrega ejecutada con indiscutible maestría por este esteta, sensible a la música y al arte, extraordinario maestro de la moral, este hombre de Dios que ha llevado a la Iglesia sosteniéndola firmemente por intrincados vericuetos sembrados de ocultas flaquezas humanas. Le ha tocado lidiar con dramáticas herencias que han tenido en los débiles uno de sus flancos y no le ha temblado el pulso para denunciarlas y ponerlas en mano de la justicia. Ha sido un clarividente teólogo que ha denunciado los errores y endebles puntos de vista de ciertas ideologías, un mártir de la ingratitud traicionado en su propio entorno, papa del perdón, un pontífice que ha tomado el testigo de su predecesor velando por la fe de los jóvenes que esperaban gozar de su presencia en Río de Janeiro y a través de las redes sociales inmediatamente le han respaldado y mostrado su cariño, un fecundo escritor que ha sabido acercar a las gentes sencillas los misterios de la fe. Preocupado por el devenir de la Iglesia y del mundo no ha dejado de nutrirnos con su oración y reflexión. Gran estratega del discurso genuino, riguroso, ha abordado cuestiones que muchos en su cortedad de miras no supieron entender como ha sucedido con intervenciones que hicieron correr ríos de tinta y fueron mal interpretadas hasta la saciedad. No soy yo quien va a volver ahora sobre ellas; son bien conocidas. Deja una sensacional herencia al pensamiento con textos magistrales, encíclicas, sermones, catequesis, numerosos estudios y ensayos diversos que nutren a los estudiosos de multitud de paraninfos académicos. De todo ello se habla ya y seguirá haciéndose al menos hasta que culmine el plazo que se ha impuesto, con infinidad de noticias y balances de lo que han dado de sí estos años al frente de la Iglesia. Pero siempre, no se olvide, habría que señalar al peso de la cruz a la que vive abrazado, hilvanada de renuncias y de sacrificios, de noches interminables de oración, jornadas cuajadas de sufrimientos personales y ajenos, éstos aún más dolorosos, y una suma de preocupaciones que se amontonan imprevisiblemente en su agenda cotidiana más las que un papa que está alumbrado por el Espíritu Santo conoce. Ha dado a la Iglesia este Año de la Fe como antes había dedicado otros a los sacerdotes, por ejemplo, y ha sido adalid de la nueva evangelización. Benedicto XVI nos ha amado y sigue haciéndolo. Simplemente por todo ello merece nuestra piedad y gratitud. No interpretemos como casualidad que haya elegido ese momento en el que se trataba de la canonización de nuevos miembros de la Iglesia para anunciar su renuncia porque este pontífice no ha dado ningún paso al azar. Queda abierto para la reflexión. También ha dejado para su sucesor fecundas vías abiertas en todos los frentes.

Hoy adquiere nuevo realce la modesta presentación que hizo de sí mismo cuando fue elegido pontífice:

“Queridos hermanos y hermanas: después del gran papa Juan Pablo II, los señores cardenales me han elegido a mí, un simple y humilde trabajador de la viña del Señor. Me consuela el hecho de que el Señor sabe trabajar y actuar incluso con instrumentos insuficientes, y sobre todo me encomiendo a vuestras oraciones. En la alegría del Señor resucitado, confiando en su ayuda continua, sigamos adelante. El Señor nos ayudará y María, su santísima Madre, estará a nuestro lado. ¡Gracias!”.

Comparándolas con las palabras que ha pronunciado para anunciar su renuncia se vuelve a constatar su humildad y pureza de corazón: “… he llegado a la certeza de que, por la edad avanzada, ya no tengo fuerzas para ejercer adecuadamente el ministerio petrino. Soy muy consciente de que este ministerio, por su naturaleza espiritual, debe ser llevado a cabo no únicamente con obras y palabras, sino también y en no menor grado sufriendo y rezando. Sin embargo, en el mundo de hoy, sujeto a rápidas transformaciones y sacudido por cuestiones de gran relieve para la vida de la fe, para gobernar la barca de San Pedro y anunciar el Evangelio, es necesario también el vigor tanto del cuerpo como del espíritu, vigor que, en los últimos meses, ha disminuido en mí de tal forma que he de reconocer mi incapacidad para ejercer bien el ministerio que me fue encomendado […]. Queridísimos hermanos, os doy las gracias de corazón por todo el amor y el trabajo con que habéis llevado junto a mí el peso de mi ministerio, y pido perdón por todos mis defectos…”.

Escuchándole hablar así, no cabe hacer más comentarios. Aunque los analistas y la tromba de comentaristas salgan al paso haciendo sus particulares consideraciones en un compendio interminable de reacciones diversas, repito, la clave de su acontecer está en su ilimitado abrazo a la cruz, esa tras la que sigue pertrechado alumbrando al mundo. Es la señal, el signo indeleble de un hijo de Dios, del cristiano, del seguidor de Cristo.

Gracias, amado pontífice. Gracias, de todo corazón, por tanta dedicación y generosidad derrochadas sin nosotros saberlo, sin exigir nada a cambio, por tantos desvelos, por sostenernos con tu oración; gracias por habernos entregado lo mejor de ti, por haberte desgastado por Cristo y su Iglesia, y por seguir llevando sobre tus hombros el peso de la cruz… Te echaremos mucho de menos. Estamos siempre contigo.

viernes, 1 de febrero de 2013

Por Isabel Orellana



EL DIFÍCIL CONSUELO



Hace años en mi libro Pedagogía del dolor incluí el siguiente fragmento de la extraordinaria obra de Dostoiewski Los hermanos Karamazov, reflejando la indecible angustia de una madre marcada por la tragedia: cuatro hijos fallecidos. Ante la muerte del último, que era el benjamín, el starets Zósimo, que advertía su inmenso pesar, le narró esta tierna historia, que hoy reproduzco de nuevo:
«… un gran santo vio en el templo a una madre que lloraba como tú y también a causa de que el Señor había llamado igualmente cerca de sí a su único hijo. ‘¿No sabes –le dijo el santo-, lo osados que son esos niños ante el trono de Dios? Nadie hay más atrevido en el reino de los cielos: ‘Señor –le dicen– nos has dado la vida, pero apenas hemos visto la luz del día y ya nos las quitas’. Piden y reclaman con tanta insistencia, que el Señor los hace ángeles. Por eso –dijo el santo–, alégrate, mujer, no llores: tu hijo está ahora con el Señor en el coro de los ángeles».

Este pasaje vino a mi mente el pasado día 5 de enero al conocer la funesta noticia que acompañaba a la cabalgata de los Reyes Magos en Málaga: un niño arrastrado por el júbilo del momento, no reparó en el peligro y quedó prácticamente yerto en el asfalto sembrando el dolor a su alrededor mientras volaba al cielo.

La pérdida de un ser humano siempre es dolorosa. Cuando la muerte se lleva consigo a alguien de tan corta edad, suscita inevitable conmoción. El primer reto que se presenta es cómo saber consolar a unos padres, a una familia rota por la tragedia por causa de un revés del que nunca podrá reponerse porque cada uno es irrepetible, y la huella que deja tras de sí en el corazón de sus seres queridos cuando abandona este mundo es imborrable. Pero hay que seguir. Y en esa voluntad de hacer frente al día a día, aunque a muchos le cueste admitirlo, se esconde algo más fuerte que uno mismo. La fortaleza que el ser humano exhibe ante el dolor es signo de una grandeza que difícilmente pudo labrarse él mismo. ¿Quién puede darla sino Dios? Esta convicción que claramente sustenta la fe es un baluarte para sostener a una persona que sufre. Desde esta columna lo he dicho ya en otras ocasiones, aunque con distintas palabras, no cabe pensar en un Dios Padre, infinitamente misericordioso, como el artífice de nuestros males. Un compendio de circunstancias imprevisibles se aliaron esa tarde para que esta criatura en la que sus padres tenían depositados sus sueños partiera tan prontamente de este mundo.

Cuando tenemos cerca de alguien que sufre reparamos fácilmente en nuestra indigencia. Constatamos que no nos podemos poner en su lugar, y que no está en nuestra mano erradicar su dolor, lo que quiere decir que no estamos en posesión de la fórmula exacta para proporcionarle consuelo. Ese bálsamo que el starets Zósimo ofreció a la desconsolada madre podría suavizar con su enternecedora historia, que seguro no está lejos de la gloria que obtienen los pequeños que la alcanzan tempranamente, podría tal vez poner esa nota de serena esperanza en el roto corazón de sus padres. Descanse en paz este niño malagueño, hoy corona del Padre, que rompió con su inesperado vuelo las sonrisas de una tarde que inundaba el entorno del bellísimo Paseo del Parque y un sentido abrazo para sus familiares.